Entradas Jesucristo Superstar

Jesucristo Superstar es una producción inspirada en la vida de Jesús en los días previos a la llegada a Jerusalén. Una obra que pese a tener un fondo religioso, tiene notas modernas, alusiones a la vida actual que la convierten en una obra atemporal. Las entradas de Jesucristo Superstar permiten al público disfrutar de una ópera rock sorprendente, tanto en actuaciones como en la trama, un descubrimiento único que enamora.

La vida de Jesús, vista de otro modo

Jesucristo Superstar está formada por la música de Andrew Lloyd Webber y las letras de Tim Rice, una combinación perfecta para que el público que disponga de entradas de Jesucristo Superstar pueda vibrar con cada nota y cada estilo que se suben al escenario en esta espectacular representación.

Inicialmente, Jesucristo Superstar surgió como un álbum conceptual en 1970 para un año después pasar a formar parte de la oferta de ocio de los escenarios de Broadway. Constituye una adaptación libre de los Evangelios, centrándose sobre todo en los siete últimos días de la vida de Jesús de Nazaret. La historia no contempla el tema de la resurrección para evitar realizar referencias al aspecto divino que lleva implícito.

Esta producción da un protagonismo importante a Judas Iscariote quien no está contento con el cambio de dirección que ha sufrido la doctrina de su maestro Jesucristo y decide realizar un enfrentamiento político y personal con él. Este punto no aparece para nada en la Biblia aspecto que demuestra la novedad y la peculiaridad de esta producción musical. A lo largo del desarrollo de la misma se hacen diversas alusiones a actitudes contemporáneas, a visiones irónicas de la vida moderna resultando una obra atemporal, adaptada a cualquier realidad.

Producciones e influencias de Jesucristo Superstar

El éxito de esta producción ha permitido que el público de diversos países pudiese disfrutar con los números musicales y el relato sorprendente de Jesucristo Superstar. Broadway, Londres, España, México o Suecia han sido algunas de las ciudades donde ha podido verse esta obra como parte de la oferta de ocio cultural.

La relevancia de esta obra es tal que ya en 1973 fue llevada a la gran pantalla de la mano de Norman Jewison alcanzando un rotundo éxito en taquilla, consiguiendo una aceptación increíble por parte del público. La película fue rodada en diversas localizaciones de Oriente Medio y sus protagonistas consiguieron un gran reconocimiento siendo nominados para el Globo de Oro. En el año 2000 se realizó una segunda película esta vez en formato doméstico dirigida por Edwards y Nick Morris consiguiendo un premio Emmy. El éxito de esta producción continuó a lo largo del tiempo y en 2008 se anunció la realización de una nueva adaptación para el cine de la mano de Marc Webb.